Montar una tienda online es cada vez más accesible desde el punto de vista técnico, pero no es tan sencillo desde el punto de vista legal. Aunque no tengas un local físico, vender por internet implica cumplir con varias normas que afectan a tu negocio, tus clientes y la administración. Si no las cumples, puedes enfrentarte a multas o incluso al cierre de la web.
Aquí te explico los principales aspectos legales que debes tener en cuenta antes de vender online, especialmente si vas a operar desde España o desde países hispanohablantes de América Latina.
1. Estar dado de alta como autónomo o empresa
Para vender legalmente, necesitas estar registrado como profesional o empresa ante la administración pública de tu país.
En España, esto implica:
- Darse de alta como autónomo (modelo 036 o 037 en Hacienda)
- Inscribirse en la Seguridad Social
- Declarar el IVA trimestral y el IRPF (o impuesto de sociedades si montas una SL)
En países como México, Argentina o Colombia, también debes estar inscrito en el régimen fiscal correspondiente y emitir comprobantes electrónicos.
Importante: aunque vendas poco al principio, Hacienda no hace distinciones. Si ganas dinero, estás obligado a declararlo.
2. Cumplir con la Ley de Comercio Electrónico
Tu web debe cumplir con ciertos requisitos básicos, como:
- Aviso legal: quién eres, NIF/CIF, dirección y cómo contactarte.
- Política de privacidad: cómo recoges, usas y proteges los datos personales de los clientes.
- Política de cookies: si usas herramientas como Google Analytics o píxeles de seguimiento, necesitas el aviso de cookies y el consentimiento del usuario.
- Condiciones de compra: precios, impuestos, formas de pago, política de envíos, devoluciones, plazos, etc.
Todo esto debe estar accesible desde la web. Muchos usan plantillas, pero lo ideal es adaptarlo a tu negocio.
3. Protección de datos (RGPD en Europa)
Si vendes a clientes en Europa (o estás en un país de la UE), tienes que cumplir con el Reglamento General de Protección de Datos (RGPD):
- Debes pedir el consentimiento expreso para tratar datos personales.
- Necesitas un sistema para que el cliente pueda ejercer sus derechos (acceso, rectificación, eliminación…).
- Si usas formularios o newsletter, debes informar de forma clara y concreta.
- Tienes que firmar contratos de tratamiento de datos con proveedores (por ejemplo, Mailchimp, Shopify, etc.).
4. Derecho de desistimiento y devoluciones
En la Unión Europea, todo consumidor que compre online tiene 14 días naturales para devolver un producto sin tener que justificar nada, salvo excepciones (productos personalizados, higiene, software digital activado, etc.).
Esto se llama derecho de desistimiento y debe estar claramente informado en tu web. Además:
- Debes ofrecer un formulario de desistimiento (aunque el cliente no esté obligado a usarlo).
- Tienes que reembolsar el importe completo, incluidos gastos de envío iniciales (pero no los de la devolución si lo especificas).
En América Latina no hay una norma común, pero muchos países exigen políticas claras de devolución y transparencia en la atención al cliente.
5. Emitir facturas o comprobantes válidos
Cualquier tienda online está obligada a emitir factura o comprobante válido, aunque sea digital. Además:
- Debe incluir los impuestos aplicables (IVA en España, IVA o equivalentes en otros países).
- Si vendes fuera de tu país, infórmate sobre el tratamiento fiscal de las ventas internacionales.
- En muchos casos, los sistemas de ecommerce ya generan facturas automáticas, pero asegúrate de que cumplen con los requisitos legales.
6. Requisitos específicos por tipo de producto
Según lo que vendas, puede que necesites licencias especiales. Ejemplos:
- Alimentación: necesitas registro sanitario.
- Cosmética: requiere notificaciones a sanidad y etiquetado conforme.
- Suplementos, alcohol, productos infantiles o electrónicos: tienen normativas propias.
Consulta siempre si tu producto está regulado de forma específica.
7. Plataforma de pagos segura
Debes ofrecer un sistema de pago seguro y cumplir con las normativas de protección frente a fraudes. Usar plataformas como Stripe, PayPal o Redsys facilita mucho esto.
Además, ten en cuenta:
- Informa al cliente de forma clara antes y después del pago.
- Usa cifrado HTTPS en toda la tienda (ya no es opcional).
- Ofrece canales de contacto si hay problemas con el pago.
Conclusión
Abrir una tienda online no es solo subir productos y empezar a vender. Para evitar problemas legales, es esencial cumplir con las normativas sobre comercio electrónico, fiscalidad, privacidad de datos y derechos del consumidor.
Si no sabes por dónde empezar, puedes:
- Consultar con un asesor fiscal o legal
- Usar plantillas legales adaptadas a ecommerce
- Elegir plataformas que ya cumplan con las principales normativas (como Shopify, WooCommerce con plugins legales, etc.)
Este es un checklist con todo lo que debes revisar antes de lanzar tu tienda
Aquí te dejo un pdf para que te imprimas con todo lo que debes hacer a nivel legal si quieres emprender montando un negocio online. Es un poco extenso, pero no te asustes, la mayoría las cosas verás que son cosas lógicas que salen solas en el proceso.







